Hola
Bienvenido a la vida 🙂
Ésta… es una gran experiencia: Conocerás a otras almas que al igual que tú, están reencontrándose en la unidad a la que pertenecemos todos. Sí, ahí mismo de donde vienes y cuyo recuerdo es difuso, por ahora… no te preocupes, lo recordarás en su momento.
Disfruta la experiencia humana de tener una madre y un padre que se sienten bendecidos con tu presencia, son las almas que te acompañarán en todo momento de este viaje, con quienes experimentarás este sentido de unidad, en donde sentirás el calor del apoyo y la pertenencia, esa sensación cercana al reencuentro con tu fuente, que al final del viaje, sentirás de nuevo, hacia el padre.
Están también tus hermanos, estas almas que han elegido las mismas condiciones de vida para venir al planeta que tú. Estas son las hermosas coincidencias en las que te darás cuenta del amor que te rodea en todo instante de tu existencia, esas cosas que se te presentan en tu vida, llevándote un gran regalo en cada momento. Eso son los hermanos, regalos que elegiste con una conciencia mayor a la actual, en la que son visibles las conexiones con las almas: disfruta tus propios regalos envueltos desde un tiempo y un espacio diferentes a éste.
Durante tu vida, gozarás también del libre albedrío para tomar tus decisiones y así te encontrarás con amigos que harán la experiencia humana más disfrutable, con maestros que la llenarán de lecciones y con varias versiones de ti mismo que te reconectarán con la grandeza que llevas dentro.
Una decisión más es tu pareja, esa alma cuya belleza te hace sentir tan cerca de Dios que le pides que viajen juntos hacia él, pues sabes que con esa brújula, el viaje tendrá el mejor destino posible.
Además de estas almas con quienes te encuentras en el camino, el amor estará rodeándote en todo momento, bendiciendo tu camino y llevando luz cuando haya dudas. Encuentra esta luz en lo más simple de la vida: en la sensación cálida del sol tocando tu rostro al amanecer, en la sincronía de las aves cuando vuelan juntas y en la armonía de sus cantos, en las olas cuando llegan a acariciar la tierra y en el aire cuando baila con las hojas de los árboles, en el perfume de las flores y en el comportamiento de los animales que te recuerdan como vivir en equilibrio con tu entorno, en una noche estrellada, en el fluir de un río y en la calma de las mares y los lagos, en el sonido de las gotas de lluvia conectando el cielo con la tierra, en todo… ahí está todo lo necesario para una gran vida: la presencia del amor.
El escenario está listo, el público aplaude tu llegada, las luces apuntan al centro del templete y el telón se abre para que esa gran obra llamada vida, sea ejecutada magistralmente por el gran protagonista: ¡tú!.
¡Felicidades!, ¡¡¡estás vivo!!!